La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), por medio de la Dirección General Impositiva (DGI), incautó 120 toneladas de porotos de soja, equivalentes a la carga de cuatro camiones, con un valor de mercado de 20 millones de pesos.
Agentes del organismo conducido por Carlos Castagneto llevaron adelante un control de ruta en los accesos a la localidad de Franck, provincia de Santa Fe, y detectaron que los transportistas carecían de la carta de porte electrónica para respaldar el origen legítimo de la mercadería. En el operativo participaron miembros de Gendarmería Nacional, dependiente del Ministerio de Seguridad.
Las tareas de fiscalización y control por parte del personal de la DGI consistieron en el cotejo documental respecto a la materia prima trasladada. Las acciones de los inspectores de la AFIP permitieron constatar que la soja tenía presuntamente un origen dudoso, por lo cual procedieron a interdictarla en su totalidad ante la severa irregularidad detectada.
De esta manera, las áreas del organismo especializadas en actividades agropecuarias focalizan sus esfuerzos para desarticular potenciales maniobras de evasión impositiva y garantizar el cumplimiento de la normativa vigente para evitar que los distintos actores de la cadena cometan irregularidades que redunden en competencia desleal para los productores legítimos.