SENASA fiscalizó el cargamento enviado desde el puerto de Campana con más de 2.900 pallets de limones, mandarinas, peras y manzanas.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) certificó y fiscalizó el proceso de tratamiento y carga de la primera exportación de la temporada 2024, de un total de 3.294.000 kilogramos de fruta fresca en bodega de buque, que partió desde el complejo portuario Euroamérica, en la localidad bonaerense de Campana, con destino a la Federación de Rusia.
La mercadería exportada fue controlada, fiscalizada y certificada por profesionales pertenecientes a distintas dependencias en jurisdicción del Centro Regional Buenos Aires Norte del Senasa, dando cumplimiento a las exigencias fitosanitarias propias del país de destino.
Cabe señalar que la carga de 2.994 pallets de frutas frescas, estuvo integrada por 2.396 pallets de limones, 115 de mandarinas, 462 de peras, y un lote con 21 pallets de manzanas.
En este contexto de exportación de alimentos frescos, también el puerto de Zárate, comenzó a recibir los primeros camiones con limones frescos provenientes de la provincia de Tucumán, carga que una vez consolidada en contenedores, será enviada a través de la vía marítima, a destinos tan diversos como exigentes desde el punto de vista fitosanitario como son: Estados Unidos, Unión Europea y la Federación de Rusia, entre los principales.
“El trabajo de los inspectores de Senasa en puertos y terminales de carga es el corolario final de un proceso que se inicio en las fincas inscriptas, continua en los empaques, bajo la supervisión de personal oficial y finaliza en los diferentes puntos de salida del país, donde cada pallet debidamente trazado, es certificado según los requisitos exigidos internacionalmente”, señaló Guillermo Ruffo, coordinador de Protección Vegetal del Centro Regional Buenos Aires Norte del Senasa.
Además explicó que “este proceso se encuentra enmarcado en el Programa de exportación de fruta fresca cítrica coordinado desde la Dirección de Comercio Exterior Vegetal, el cual garantiza además de la trazabilidad, que todos los actores de la cadena citrícola cumplan y plasmen su labor en los sistemas informáticos oficiales, creando, de esta forma, un sistema robusto y confiable para los mercados internacionales”.