Para el economista Carlos Seggiaro, la demanda mundial de commodities continuará firme con una oferta ajustada y tensiones geopolíticas que aseguran precios altos en el mediano plazo. Además, “no acordar con el FMI sería un salto al vacío”.
La agroindustria está atenta a lo que está ocurriendo en el mundo, por un lado, en relación con los precios de los commodities y el salto que dieron en los últimos días con motivo del conflicto militar entre Ucrania y Rusia (jugadores importantes del mercado granario), y por el otro, porque el acuerdo (o no) del FMI y el Gobierno argentino, plantea una serie de condicionantes en el futuro inmediato que conviene analizar.
Entre los puntos destacados que trascendieron sobre esto último, el economista Carlos Seggiaro anticipó que “el Gobierno argentino se habría comprometido en principio con el FMI a no seguir deteriorando el tipo de cambio en términos reales; es decir, el año pasado el oficial mayorista que es el que nos interesa mirar porque es el de las exportaciones del campo, subió un 22% cuando la inflación estuvo por arriba del 50%”.
SE FRENA EL ATRASO CAMBIARIO
Sobre este atraso cambiaro, según comentó Seggiaro esta semana en diálogo con el programa radial ADN Rural, “el Gobierno le habría dicho al FMI, que lo estará monitoreando cada tres meses, que el mercado oficial de cambios (mayorista) va a ir subiendo todos los meses más o menos en sintonía con la inflación, para que no se siga deteriorando”. Esto no significa que haya un golpe devaluatorio, “no”, enfatizó el analista, “pero sí van a intentar mantenerlo en términos reales, cepo de por medio, obviamente, porque el FMI quiere que los dólares no se vayan a los bolsillos de la gente sino a los pagos de los compromisos”.
Esto hace prever que “si la inflación este año termina en torno al 50 o 60%, el dólar mayorista que actualmente está en torno a los $107 tendría que terminar el año en $160 -estimó Seggiaro-. El mercado lo está viendo de esta manera también, ya que si uno observa el ROFEX de Rosario que opera el dólar futuro a diciembre, se está negociando en 156 a 157 pesos”.
TASAS POSITIVAS
Además, “el FMI le exigió al Gobierno argentino, como uno de los puntos más conflictivos de la negociación, que las tasas de interés en el sistema financiero tienen que ser positivas con respecto a la inflación”. No es un tema menor, “porque el Gobierno venía jugando con las tasas de interés negativas; si el año pasado uno hacía un plazo fijo la tasa se ubicaba en 37% cuando la inflación fue del 50%”, ejemplificó el economista. “De hecho la semana pasada el Banco Central volvió a subir las tasas de referencia por segunda vez en el año, y si bien algunos pueden decir sobre esto que es una buena noticia, lo cierto es que las tasas se mueven todas juntas, como por ejemplo los intereses del descubierto en cuenta corriente, el canje de cheques, las tarjetas, etc”, afectando también las tasas de financiamiento. “Cualquier empresario puede sacar sus conclusiones al respecto sobre cómo deberá analizar el funcionamiento de su empresa de cara al futuro”, sugirió el experto cordobés, que asesora empresas exportadoras del sector agropecuario.