El período entre el 12 y 18 de enero de 2022 tuvo características climáticas contrastantes, con dos escenarios ambientales muy diferentes.
Al inicio, estabilidad climática, días soleados, altas temperaturas, registros térmicos superiores a los 44 ºC, vientos leves de direcciones variables, preferentemente del sector norte, ambiente seco, tórrido, sofocante, situación que a mediados del domingo 16 cambió, aumentó paulatinamente la nubosidad, la inestabilidad y se produjeron precipitaciones de variadas intensidades, algunas ráfagas de viento y puntuales caídas de granizo, con baja incidencia sobre los cultivos, condiciones que continuaron produciéndose hasta el final del período, en toda el área del SEA.
Los montos pluviométricos acumulados fluctuaron desde mínimos de 28 a 30 mm y máximos de 85 a 90 mm, con la particularidad fundamental y muy importante, de la baja y regular intensidad de las lluvias, cuyas características posibilitaron la infiltración de cada mm caído, permitiendo así la lenta y eficiente carga de agua en los perfiles de los suelos. Por lo que se revirtieron las difíciles situaciones, generándose nuevas y buenas expectativas por las futuras reacciones y respuestas de los cultivares al nuevo panorama, dice el informe semanal del Sistema de Estimaciones Agrícolas para el Centro Norte de la Provincia de Santa Fe, que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
Pero, al principio del período, ante la realidad ambiental que reinó, los sembradíos continuaron generando intensos procesos de evapotranspiración y alta demanda de agua útil de los suelos, que en los distintos sectores de los departamentos del área de estudio, era muy baja o nula.
Para el intervalo comprendido entre el 19 y el 25 de enero, los pronósticos prevén máximas desde su inicio, inestabilidad climática, alternancia de días con nubosidad parcial o total, precipitaciones de variadas intensidades, jornadas soleadas, registros térmicos acordes a la época del año y vientos leves de direcciones variables, características que se mantendrían hasta el final del período, en toda el área del SEA.
Las temperaturas fluctuarían desde mínimas de 18 a 31 ºC y máximas de 28 a 43°
Maíz Temprano
A lo largo de la difícil situación climática que caracterizó a la campaña del maíz, fundamentalmente en las etapas finales de su desarrollo, se fueron tomando decisiones del destino de los mismos, de acuerdo a los distintos planteos de cada sistema productivo. Por ello, el movimiento de equipos de picado/embolsado fue intenso e importante en las áreas de influencia de las cuencas lecheras del SEA. Pero, en la semana también comenzó el proceso de cosecha del cereal con destino comercial.
En cuanto a los resultados obtenidos en el picado/embolsado continuaron siendo muy dispares, en general se logró un rendimiento promedio de 8 a 10 m/bolsa/ha pero, durante la recolección, el ambiente climático cálido y el material vegetativo seco a muy seco, alteraron no solo la cantidad del producto, sino también su calidad y con serias dificultades en la concreción de buenos trabajos.
Soja de Primera
Por las características climáticas de los primeros 16 días del año, las parcelas de la soja temprana presentaron variaciones en sus estados, observándose limitaciones en su crecimiento, amarillamiento o marchitamiento de hojas y en lotes puntuales, la pérdida de plantas por mortandad.
Ante el cambio ambiental, dada la presencia de precipitaciones las dos últimas jornadas del período, se estaría ante una posible reacción de los cultivares, dependiendo de la etapa fenológica en que cada uno de ellos, se encontraba cursando.
No se detectó la presencia de insectos o de plagas de importancia y no se realizaron aplicaciones de control.
Soja de Segunda
Muy puntualmente se realizaron aplicaciones nocturnas de herbicidas post-emergente para el oportuno control de las malezas. Durante el monitoreo semanal se observó mortandad de plantas por estrés, que afectó el stand de las mismas, por unidad de superficie.