La entidad emitió un comunicado en el que se da cuenta de la necesidad de revisar el marco normativo que hoy afecta al sector industrial.
La Unión Industrial Argentina (UIA) informó que, junto a su red de representación sectorial, “continúan monitoreando el impacto de las últimas medidas y proponiendo a las autoridades correspondientes modificaciones y aclaraciones sobre la normativa, en especial a las relacionadas con el Decreto 377 y sus normas complementarias, que han generado un grave impacto en la operatoria de la industria argentina”. En este sentido, señalaron desde la entidad, “las alteraciones en los sistemas de Cuenta Corriente Única de Comercio Exterior (CCUCE) y en la determinación de la Capacidad Económica Financiera (CEF), ocurridas en los últimos días, sumaron aún más dificultades a la operatoria diaria de las empresas, en especial en las pequeñas y medianas”.
En el comunicado, se indica que “resulta primordial eximir del impuesto PAIS a las importaciones temporarias en su conjunto, para no afectar la competitividad argentina y la generación de divisas comerciales genuinas. La UIA considera que las medidas dispuestas poseen un sesgo muy adverso para las cadenas de valor exportadoras, en la medida que las importaciones temporarias no queden eximidas en todo el universo de insumos y bienes intermedios que requiere la producción de la oferta exportable de bienes industriales y alimentos elaborados, y se va a generar en muchos casos una pérdida económica tal que atentará contra la continuidad productiva, con la consecuente caída de las exportaciones, la pérdida de mercados externos, paradas de líneas de producción y de puestos de trabajo.
La entidad solicitó además, que se reglamente a la mayor brevedad posible y/o se aclare que la exención del impuesto PAIS para insumos y bienes intermedios vinculados directamente a los productos de la canasta básica alimentaria y para bienes relacionados a la generación de energía contempla todo su universo. En cuanto a los productos de la canasta básica, la UIA solicitó que también se eximan del impuesto PAIS a aquellos que se enmarcan en el acuerdo de ‘Precios Justos’, ya que su gravabilidad generará un incremento de costos que impedirá sostener los compromisos asumidos oportunamente.
La UIA advirtió también que, con la vigencia del Decreto 377/2023, las empresas están sufriendo débitos indebidos del impuesto PAIS por parte de los bancos comerciales y/o del pago a cuenta establecido por AFIP en la Resolución General 5393/2023, que generan una presión fiscal mayor sobre actividades eximidas por el Decreto N°377/2023, generando un aumento de costos en dichas cadenas productivas con su correspondiente impacto inflacionario.
Además, este impuesto altera retroactivamente el pago de contratos de importaciones y servicios que habían sido pautados con anterioridad y ya aprobados (SIRAs y SIRASEs), pero que por la calendarización que plantea el sistema para el giro de divisas se pagan a 60/90/120/180 y hasta 365 días, lo que -sumado a las dificultades operativas- está generando problemas económicos a muchas empresas y demoras y/o incumplimientos con proveedores del exterior.
Todo esto se da en un marco [en el cual] se multiplican los problemas para el giro de divisas al exterior tanto para bienes [como para] servicios vinculados con la producción, donde la aprobación de SIRAS y SIRASES resulta cada vez más difícil de obtener. Es clave generar los mecanismos pertinentes para darle la mayor celeridad posible a insumos críticos, bienes intermedios y repuestos para bienes de capital”.