Está finalizando una paupérrima cosecha de granos, en cantidad y calidad, que va a dejar secuelas en todas las cadenas agroindustriales, e incluso va a limitar los planes de la próxima campaña. En este contexto, lsa cadenas de valor esperaban de las autoridades «actitudes responsables» que descompriman la situación aliviando el peso de las retenciones. En efecto, consideran que se trata de «un impuesto que casi ningún país tiene, porque castiga a los sectores más eficientes y atenta directamente contra la exportación y la generación de divisas»
Sin embargo, lejos de eso, las cadenas se enteraron que el Gobierno ha decretado nuevamente disponer de recursos de las retenciones a la soja para subsidiar la harina de trigo. «Es una medida no solo arbitraria sino también probadamente inútil, ya que la incidencia del precio del trigo en el precio del pan no alcanza el 15%, según diversos estudios», indicaron.
Por eso, las cadenas de valor de los cuatro principales cultivos del país (Acsoja, Maizar, ArgenTrigo y Asagir) principal fuente de ingresos del país con más de u$s 41.000 millones ingresados en 2022 según el INDEC, rechazaron este tipo de medidas, «que no hacen más que provocar transferencias forzosas, distorsiones, falta de transparencia y resquemores entre los sectores, sin solucionar los problemas de fondo».