En tiempos donde la propiedad privada pareciera verse amenazada, la Sociedad Rural de Santa Fe sufrió un episodio que encendió la luz de alerta. Cerca del mediodía del martes, unas 50 personas pertenecientes a agrupaciones sociales se concentraron frente a la sede que la entidad tiene en uno de los boulevares de la capital provincial.
En diálogo con el programa radial ADN Rural, el presidente ruralista Ricardo Argenti relató lo vivido: «cerca de las 11 de la mañana nos avisan que un grupo de personas se concentró frente a nuestra sede y sin tener certeza del motivo de esa determinación, dos integrantes de la Comisión Directiva nos dirigimos hasta allí para interiorizarnos de la situación».
Acto seguido, comentó que los empleados de la entidad lograron cerrar las puertas del predio minutos antes de la llegada de los manifestantes, que decidieron llevar a cabo una especie de asamblea «o charla», como catalogó Argenti, expresando su absoluto rechazo a la posición de la entidad ruralista (conocida mediante comunicados) contra las usurpaciones y en defensa del derecho de la popriedad privada. «También se mostraron a favor de la toma del campo de la familia de Etchevehere en Entre Ríos», confirmó el dirigente.
La situación duró aproximadamente una hora y media. Durante ese tiempo, los dirigentes se comunicaron con la policía y la Fiscalía pero prácticamente sin éxito, teniendo en cuenta que sólo aparecieron dos oficiales de la fuerza motorizada para hablar unos minutos con los manifestantes. Si bien el propio Argenti reconoció que «no tuvieron intenciones de hacer destrozos ni pintadas», la Comisión Directiva decidió hacer la denuncia correspondiente.
A modo de reflexión, el presidente de la Rural expresó: «preocupa la ausencia del Estado y de la Justicia; realmente genera preocupación el hecho de que no haya una reacción inmediata en defensa de los bienes privados».