ACSOJA presentó un proyecto elaborado por FADA que revela la carga impositiva que soporta la cadena. Según el estudio, una reducción permitiría una producción en 2027 superior a los 68 millones de toneladas.
Teniendo en cuenta que la situación tributaria plantea interrogantes en los futuros volúmenes de la producción, la comercialización y la industrialización del grano de soja, ACSOJA presentó un proyecto elaborado por FADA que revela la carga impositiva que soporta la cadena.
Según FADA, “la cadena de la soja considera que los derechos de exportación como un impuesto distorsivo, pero esta nueva propuesta busca una salida posible en términos de impactos económicos y fiscales”, y afirmaron que eliminar un 2% por año de las retenciones, podría generar, no sólo que se sostenga la rentabilidad de la producción, sino también que en 2027 la producción de soja aumente, superando los 68 millones de toneladas”
Los datos relevados corresponden al mes de junio de 2019, con DEX de 27,1%, con una proyección a la situación actual y contempla los eslabones primario, comercial e industrial, para un modelo donde el grano de soja pasa por acopio, se procesa en la industria y se exporta en su totalidad.
En el eslabón primario el impuesto a las ganancias es el de mayor peso, seguido en importancia por el impuesto inmobiliario rural. Entre ambos explican el 83% del total de impuestos, mientras que el 17% restante corresponde al impuesto a los créditos y débitos bancarios (ICDB), tributos sobre la mano de obra, ingresos brutos (IIBB), sellos y tasas municipales. En el actual esquema tributario, las DEX son liquidadas por la industria e impactan directamente en el precio de venta del productor. Analizados por destino, el Estado Nacional explica el 82% de la carga tributaria, un 15% es provincial y el restante 2%, municipal.
En el eslabón industrial los DEX explican el 95,02% de los impuestos (descontándose del precio de venta al productor), siendo el 4,98% restante explicado por IIBB, ICDB, impuestos sobre la mano de obra, sellos y Derechos de Registro e Inspección (DREI),
En el eslabón comercial los tributos de mayor peso son los correspondiente a la mano de obra, seguidos por los impuestos transaccionales (ingresos brutos, ICDB y sellos).
La carga tributaria entre estos tres eslabones asciende a US$ 150,21 por tonelada de soja y los derechos de exportación (DEX) explican el 66%, mientras que el otro 34% se distribuye entre el resto de los impuestos: 21% ganancias, 3% ICDB, 3% contribuciones y ART, 3% inmobiliario rural provincial, 2% impuesto a los sellos, 1% ingresos brutos y 1% tasas municipales.
“Como consecuencia de la alta carga tributaria, se ha desincentivado la producción, se ha generado un estancamiento del área sembrada y de la producción a través del tiempo”, indicaron las entidades.
Analizado por destino de la tributación, el 93% corresponde al Estado Nacional, seguido por el nivel Provincial (6%) y por último el Municipal (1%). Expresado en valores relativos, la recaudación de US$ 150,21 por tonelada representaban en Junio de 2019: 67,89% del margen bruto de la cadena . Con la actual composición de los DEX del 33%, y manteniendo constante todos los demás valores, la carga tributaria por tonelada asciende a US$ 165,49, representando los siguientes valores relativos: 74,19% medido sobre el margen bruto.