Las precipitaciones de la semana anterior modificaron los síntomas de estrés hídrico y térmico. En tanto, los cultivares de soja tardía muestran diferentes escenarios.
La situación ambiental del intervalo provocó reacciones favorables en los lotes de soja temprana (de primera), principalmente en el área de mayores precipitaciones durante la semana anterior, se modificaron los síntomas de estrés hídrico y térmico.
Diferentes escenarios mostraron los cultivares de soja tardía (de segunda), particularmente en el área centro este y noreste, que en un desarrollo vegetativo bajo, condicionado por el estrés hídrico – térmico y las escasas precipitaciones, no presentaron reacciones favorables, pero sí, secado de hojas basales, que reflejaron el impacto de la realidad climática ocurrida.
En las próximas jornadas continuarían las evaluaciones para una fehaciente determinación de los grados de impactos o daños registrados.
Se observaron los siguientes estados fenológicos: V “estados vegetativos”, V8 (8º nudo), V9 (9º nudo), R “estados reproductivos”, R1 (inicio de floración), R2 12 (floración con uno de los nudos superiores con hojas desarrolladas), R3 (vaina de 5 mm de longitud en nudo), R4 (vaina de 20 mm de longitud en nudo), en R5 (comienzo de llenado de semilla en nudo, semilla de 3 mm de longitud) y los más avanzados, en R6-1 (semilla verde de tamaña máximo del nudo).