Situación de quebranto en los tambos

La Mesa de Productores de Leche de Santa Fe, reunida en su sede de Rafaela, analizó la crítica situación por la que atraviesan los tambos y también anunciaron una reorganización interna para continuar gestionando reclamos por una lechería con su cadena ordenada a nivel nacional, donde las reglas de juego sean claras y haya previsibilidad particularmente para el productor.
Estuvieron presentes Roberto Perracino en su calidad de presidente, acompañado por Oscar Girardotti, Gustavo Aresio, Fernando Boggero, Danisa Smidt (secretaria), Carlos Bertone y Pedro Morini, este último como coordinador técnico, recientemente incorporado.
Nuestro Agro, si bien escuchó los diferentes temas tratados en un amplio diálogo, entrevistó a Roberto Perracino y a continuación se ofrece una síntesis de la misma.
Nuestro Agro (NA) – ¿Cómo está hoy la situación actual de la lechería?
Roberto Perracino (RP) – En el comienzo de año vemos a una lechería muy complicada y quebrada, hoy los números están lejos de cubrir nuestros costos, venimos con el arrastre de una larga sequía, con los efectos del dólar soja, dos devaluaciones, es decir que los costos subieron por el ascensor y la recomposición del precio de la leche viene a lomo de tortuga. Este panorama da como resultado que a los precios del mes pasado tenemos una lechería quebrada, a los precios del mes de enero y febrero (aún no se conocen) asoma un índice de esperanza, estamos atentos y expectantes, siendo fin de mes no tenemos aún el valor que van a pagar las industrias, y se agrega ahora la ola de calor que ha generado importante baja de producción en los rodeos.
NA – ¿Quiere decir que se avecinan meses difíciles para el sector primario?
RP – Sin duda, si no tenemos un alivio ahora, los tambos en marzo van a tener serios problemas para pagar sus gastos y se van a producir quebrantos, para colmo esta ola de calor hace que se adelante la confección de reservas, especialmente el ensilado, son reservas que tienen un alto costo, demasiado, cuestionadas por los propios productores que no saben cómo encarar valores de $ 500.000 la ha. de ensilado.
NA – A nivel provincia y nación ¿ven alguna reacción o bien han encarado algunas reuniones?
RP – Estamos expectantes, este Gobierno recién comienza, hay que darle su tiempo, vemos que a nivel provincial hay inquietudes, ganas de hacer cosas y aguardamos reunirnos lo antes posible. Lo que anhelamos es conseguir hoy un financiamiento urgente para afrontar los costos de la confección de silos que es vital para la producción del año, hoy un silo de 100 mts. tiene un costo de 5 millones de pesos, son valores que asustan mientras nos pagan $240 por litro, según la zona y la industria. Por eso decimos que estamos muy atentos a lo que vamos a cobrar por nuestra producción de enero y febrero. Y aún más grave es que las reservas no se pueden pagar en largas cuotas, hoy todo es a corto plazo. Comprar el maíz, el expeller de soja, y todos los componentes de la alimentación es hablar de millones de pesos.
NA – Con qué objetivos encara MEPROSALFE el nuevo año?
RP – Nosotros estamos reorganizando nuestras actividades para el año y la idea es buscar consensos entre las entidades hermanas y tratar de coincidir en 3 ó 4 puntos básicos para elevar nuestras inquietudes a nivel nacional y tratar de llegar a un ordenamiento en el sector, MEPROSALFE se está preparando para esto, para jugar en primera con jugadores que conozcan la problemática de la lechería. Y en esa línea hemos convocado a Pedro Morini, un hombre muy conocido en la zona, de vasta experiencia política y en la actividad lechera, una persona que sabe de los problemas de los productores, que ha sido autor de un recordado proyecto de Ley y que nos va gerenciar nuestras actividades en los niveles que correspondan, obviamente con el acompañamiento de la comisión directiva.
NA – ¿Hay mucho pesimismo en el sector?
RP – El mensaje que deseamos transmitir al productor es optimista ¿por qué digo esto? Porque una vez normalizado el precio de nuestra producción, lo que estamos seguros que va a suceder, ante todo porque el gobierno ya dio una buena señal anunciando libre exportación, lo que nos indica que van a venderse afuera todos los saldos exportables, y hoy los valores internacionales son buenos, quiere decir que el sector industrial va a tener que trasladar mejores precios al productor, creemos que eso va a ocurrir. No obstante, no podemos ocultar la preocupación de los tamberos en estos meses muy difíciles que vienen con un arrastre desde el 2022, no sólo hoy la ola de calor aunque los maíces están buenos, también nos aparece una enfermedad en los cultivos de maíz que es el problema de “la chicharrita”, se denomina spiroplasma, que es una bacteria sin pared celular que llega a la planta de maíz a través de un insecto minúsculo que la adquiere de una planta de maíz enferma, esta chicharrita es muy específica del cultivo, en el cual se alimenta y reproduce.
NA – No obstante ustedes plantean un panorama de posibles quebrantos y cierre de tambos para los próximos meses. ¿Cómo hay que interpretarlo?
RP – Que quede claro, hoy -reitero- la realidad nos golpea fuerte y pone en riesgo a muchos establecimientos, es imprescindible contar con financiamiento, si no se recompone el precio en los próximos 60 días, la situación va a ser aún más crítica, pero según estamos analizando, tratamos de mostrarnos optimistas en cuanto a la recomposición de precios, hoy esta crisis la padecen tanto el tambero chico como el grande aunque con diferentes ahogos, pero confiamos en que los valores van a mejorar con las buenas exportaciones que además generarán recursos a la caja del Estado. No se puede ignorar que la cadena láctea genera mucha mano de obra en todas las regiones que producen leche, también la industria es parte fundamental como generadora de trabajo. No queremos que en otoño las ferias estén liquidando vacas de tambo y se vuelva a repetir otro colapso de la lechería argentina.